Madagascar: A Little Wild

La pandilla planea celebrar el cumpleaños de Melman en una exhibición del espacio exterior con un vehículo espacial genial. Pero cuando Gloria se obsesiona con un juego portátil, se pierde momentos especiales con sus amigos y aprende el valor de vivir en el presente.

La pandilla se dirige al "Día de los mejores fanáticos" en el Giraffe Stadium de Nueva York, donde Alex se ve atrapado en la atención de apoyar al equipo ganador. Cuando su comportamiento termina hiriendo los sentimientos de Marty, Alex se entera de que sus amigos son el único equipo que importa.

La fe de Gloria en sí misma se pone a prueba cuando hace una audición para "El lago de los cisnes" y es rechazada porque es un hipopótamo. Con la ayuda de sus amigos, se entera de que no necesita a nadie más para decidir que es una prima hipporina; ya lo es.

Cuando los leones marinos despreocupados atraen a las multitudes de su espectáculo, Alex decide que necesita actuar como los leones marinos. Pero al descubrir que sus intentos de competir con ellos no recuperan a las multitudes, Alex aprende a ser fiel a sí mismo.

Melman encuentra una flor de la suerte y está convencido de que hoy será el mejor día de su vida. Pero cuando una serie de eventos desafortunados amenazan con arruinarle el día, se enfrenta a la decisión de ahogarse en sus penas o "recuperar el día".

Cuando su visitante favorito del zoológico pierde su osito de peluche, la pandilla emprende una loca aventura por la ciudad de Nueva York para devolvérselo. En el proceso, Marty aprende que algunas cosas de la vida no se pueden encontrar en un manual de instrucciones.